➤ Los 2 Tipos De Leishmaniasis En Perros Más Comunes

La Leishmaniasis en perros es una condición de salud muy delicada que requiere ser diagnosticada y tratada a tiempo, de lo contrario, podría ser mortal. Existen 2 tipos de leishmaniasis en perros que pueden presentarse dependiendo del tipo de parásito que se transmita. Ambas pueden presentar síntomas comunes y otros que la diferencian.

Los patógenos de Leishmania, nombrados en honor al médico tropical escocés William Boog Leishman, son parásitos unicelulares en la sangre. En general, se transmiten a través de la picadura de la mosca de arena, que infecta a los perros con leishmania peligrosa al chuparles la sangre. Sin embargo, no se puede descartar la transmisión a través de una transfusión de sangre o el contacto con un perro infectado.

Sin embargo, en el último caso, esto solo es posible si el perro ya tiene una lesión cutánea abierta que entra en contacto directo con llagas o fístulas en los perros afectados. Después de la infección, los leishmania se depositan en las células de los tejidos (macrófagos / células carroñeras), donde se multiplican y poco a poco atacan los ganglios linfáticos, el bazo, la médula ósea, el hígado y otros órganos del animal.

Lo que es engañoso acerca de la leishmaniasis es que a menudo solo se produce años después de la picadura del mosquito infeccioso. Las vacaciones en los destinos cálidos del sur son olvidados por muchos dueños de perros antes de que surjan los primeros signos de leishmaniasis. Sin embargo, tanto el largo tiempo de incubación como la multitud global de cepas de leishmaniasis infantil con diferentes formas y patrones de enfermedad aseguran que los síntomas a menudo no se presenten sino hasta muy tarde.

Tipos de leishmaniasis en perros

En los perros se pueden presentar dos tipos diferentes de leishmaniasis: Visceral y Cutánea. Cada uno de estos tipos afectará diferentes partes del cuerpo del perro. La forma cutánea es la más común entre los 2 tipos de leishmaniasis en perros presentándose hasta en 80% de los casos.

Leishmaniasis Visceral

El nombre de visceral se le da porque en estos casos, los parásitos atacarán los órganos abdominales del animal llamados vísceras. Es el tipo menos común entre los dos siendo diagnosticado en cerca de 1 tercio de los perros infectados.

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Este tipo de leishmaniasis se presentará con condiciones como diarrea y pérdida del apetito, una muestra de las afecciones abdominales que se desarrollan.

Otros síntomas serán:

• Pérdida de pelaje
• Negativa a realizar actividades físicas
• Sangrado nasal
• Vómitos
• Severa pérdida de peso
• Anorexia

Leishmaniasis Cutánea

De los dos tipos de leishmaniasis en perros la forma cutánea es la más común. Una vasta mayoría de los perros diagnosticados con esta enfermedad presentan síntomas en la piel. Se estima que cerca del 80% de todos los pacientes con leishmaniasis presentan algún tipo de alteración de la piel y el pelaje.

Las primeras lesiones aparecerán en el lugar de la picadura, usualmente en la cara u orejas, que es el sitio más común para que suceda en contacto con la mosca transmisora.

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Los síntomas más comunes de esta forma son:

• Úlceras
• Pérdida de pelaje
• Nódulos en la superficie y entre la piel
• Crecimiento anormal de las uñas que se presentan más quebradizas de los normal.
• Escamas en la piel que se muestran como un parche más grueso de piel y pérdida de la pigmentación. Esto se conoce como Hiperqueratosis.
• Necrosis en las puntas de las orejas causada por vasculitis.
• Inflamación de los ganglios linfáticos.

Tratamiento

El tratamiento para ambos tipos de leishmaniasis en perros será el mismo. A menos que el perro esté extremadamente enfermo, será tratado como paciente externo. Si está demacrado e infectado crónicamente, es posible que debas considerar la eutanasia porque el pronóstico es muy malo para tales animales. Pero si el perro no presenta una infección grave, es posible que el veterinario recete una dieta alta en proteínas diseñada específicamente para ayudar con la insuficiencia renal si esta se presenta.

Es importante destacar que la leishmaniasis es una infección zoonótica. Esto quiere decir que los organismos que se encuentran en las lesiones cutáneas pueden ser transmitidos a los humanos. También es importante saber que esos organismos no son eliminados nunca por completo, por lo que las recaídas serán inevitables y también necesitarán otro ciclo de tratamiento.

Además de esto, algunos medicamentos farmacológicos pueden utilizarse para tratar esta enfermedad. El veterinario será el responsable de aconsejar cuál será el mejor curso de tratamiento.