Cómo Limpiar el Lavavajillas Con Vinagre y Bicarbonato

El lavavajillas es probablemente uno de los electrodomésticos más usados en el hogar, pero cuando se trata de mantenimiento, muchas personas lo descuidan. Si te interesa saber cómo limpiar el lavavajillas con vinagre y bicarbonato, no dejes de leer esta guía paso a paso.

Por la cantidad de uso que tiene este electrodoméstico, no lo limpias a fondo periódicamente, se corre el riesgo de que el lavavajillas se convierta en un pozo negro de bacterias, hongos, olores e incluso se puede acortar la vida útil del mismo. Una limpieza también puede evitar costosas reparaciones en el futuro.

En general, el lavavajillas agiliza la tarea de cocina menos favorita de todos, lavar los platos, por lo que darle un poco de cariño cada cierto tiempo ayudará a que siga funcionando en los próximos años. Aprende cómo limpiar el lavavajillas con vinagre y bicarbonato en esta útil guía.

Cómo limpiar el lavavajillas con vinagre y bicarbonato

Este electrodoméstico que a menudo se pasa por alto debe limpiarse de manera profunda al menos cada seis meses. Usando estos dos ingredientes de fácil acceso podrás lograr que tu lavavajillas quede impecable en corto tiempo. Te sorprenderá de la diferencia: tu máquina se verá como nueva.

Lo que debes hacer es lo siguiente:

1. Reúne los suministros

Lo primero es lo primero: reúne los productos de limpieza. Necesitarás:

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• Guantes de goma
• Palillo de dientes
• Cepillo de dientes
• Trapo de microfibra
• Agua tibia
• Bicarbonato de sodio
• Vinagre blanco destilado

2. Vacía el lavavajillas por completo

Si lo que buscas es limpiar profundamente, será importante que los limpiadores lleguen hasta las grietas y hendiduras más importantes. Para que esto suceda, se deberán quitar todas las rejillas, el filtro (algunos filtros simplemente se giran, pero otros requerirán herramientas para desenroscarlos) y los porta utensilios.

Lo que haremos es retirar todas esas partes y colocarlas en un recipiente en una mezcla de agua tibia y 1 taza de vinagre blanco destilado. Déjelos en remojo durante al menos 30 minutos.

Examina el drenaje. Lo primero que debes hacer es sacar la rejilla inferior de la máquina y examinar el drenaje para asegurarte de que no haya trozos duros de material que puedan obstruir el drenaje, causar daños a la bomba o rayar los platos. Te sorprenderá lo que encuentres ahí tirado

3. Limpia todos los escombros

Ahora que tienes una línea de visión despejada, verifica si hay escombros o suciedad persistentes. Limpia los brazos rociadores y las paredes laterales, especialmente en las esquinas de la parte superior e inferior.

Mira dentro de los pequeños orificios y ranuras por donde sale el agua. Si ves partículas de desechos o comida alojados en pequeñas grietas como estas, puedes utilizar un palillo de dientes fino o un cepillo de dientes para retirarlos y así limpiar todos los orificios.

4. Prepara el primer ciclo de limpieza con vinagre

Cuando se trata de cómo limpiar el lavavajillas con vinagre y bicarbonato, este método de limpieza se dividirá en dos ciclos separados. Para el primero lo que debes hacer es llenar un recipiente que sea adecuado para usar en el lavavajillas con 1 taza de vinagre blanco. Este envase debes colocarlo en el fondo del lavavajillas completamente vacío.

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Ahora, debes configurar un ciclo de agua caliente en el lavavajillas. La combinación del vinagre y el agua caliente despegará los restos de grasa, comida, restos de jabón y residuos así como cualquier otra suciedad pegada. La máquina debe estar vacía, aparte de la taza llena de vinagre.

5. Segundo ciclo con bicarbonato de sodio

Una vez termine el primer ciclo, debes retirar el tazón donde estaba el vinagre y espolvorear cerca de 1 taza de bicarbonato de sodio. Este polvo debe ser colocado en el fondo del lavavajillas. Vuelve a encender el lavavajillas, esta vez programado en un ciclo corto igualmente con agua caliente.

La utilidad del bicarbonato de sodio será la eliminación de manchas y olores del lavavajillas. El resultado será un lavavajillas limpio, reluciente y brillante y que olerá a limpio. El bicarbonato de sodio ayuda a desodorizar aún más el lavavajillas y a eliminar cualquier mancha.

Si aún notas que quedan manchas, puedes deshacerte de ellas usando el cepillo de dientes. Puedes humedecerlo en vinagre o una mezcla de ambos limpiadores y cepillar suavemente lo que quede.

Si debes hacer esto, corre otro ciclo corto para eliminar ese limpiador y listo, tendrás un lavavajillas impecablemente limpio.

6. Limpia el exterior

Cuando se trata de cómo limpiar el lavavajillas con vinagre y bicarbonato, no debemos solo enfocarnos en el interior. El exterior del aparato también es importante. Elige un limpiador específicamente formulado para la superficie de tu lavavajillas.

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Por ejemplo, si el exterior es de acero inoxidable, debes buscar un producto de limpieza que esté diseñado para limpiar ese tipo de superficie. Esto es porque muchos limpiadores para todo uso pueden dejar un acabado rayado o incluso rayar el acero, por lo que debes tener cuidado. Si la superficie no es de acero inoxidable, este tipo de multiusos puede resultar perfecto.

¿Otro camino a seguir? Crea una mezcla casera para limpiar el exterior. Una mezcla básica de agua, jabón para platos y vinagre blanco será un excelente limpiador casero que es seguro para todas las superficies del lavavajillas.

Utiliza un paño de microfibra y desliza en la dirección de la veta de la superficie para obtener un acabado reluciente y sin huellas dactilares. Limpia bien el panel de control y las manijas también.

Mantener limpio el lavavajillas

Ahora que sabes cómo limpiar el lavavajillas con vinagre y bicarbonato, verás muchos beneficios. La máquina no solo olerá mejor y tendrá un aspecto más fresco, sino que también encontrarás que es más eficaz.

Una vez eliminados todos los residuos, el jabón y el agua pueden rociar el aparato con toda su fuerza, resultando en platos más limpios. Intenta limpiar el lavavajillas de manera profunda al menos una vez cada seis meses. Esto ayudará para que funcione de manera óptima.

Otro consejo para mantener el lavavajillas limpio: ajusta la temperatura a 120 ° –150 ° F. Si el agua no está al menos a 120 °, no está lo suficientemente caliente para limpiar los platos de manera efectiva. Para probar la temperatura, use el fregadero más cercano al lavavajillas y llena una taza de agua con el agua del grifo más caliente posible. Coloca un termómetro adentro y lee la temperatura. Si es inferior a 120 ° o superior a 150 °, deberás ajustar el calentador de agua.

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Conclusión

Aprender cómo limpiar el lavavajillas con vinagre y bicarbonato es una excelente manera de cuidar este artefacto tan utilizado. Estos materiales no tóxicos son excelentes para obtener buenos resultados sin necesidad de gastar mucho en limpiadores además de que evita que el lavavajillas se dañe antes de tiempo.

Mantén la rutina de limpiar el lavavajillas de esta manera con la frecuencia necesaria para alejar la suciedad y los malos olores así como evitar gastos innecesarios en servicios técnicos.